La Convención Internacional de Protección Fitosanitaria (CIPF) aprobó este martes nuevas medidas internacionales para evitar que las plagas crucen las fronteras y se propaguen, informó la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural de México.

La institución indicó que durante la XIV reunión anual de la Comisión de Medidas Fitosanitarias (CMF), efectuada en Roma, representantes de diversos países coincidieron en que el riesgo de propagación de plagas a nivel internacional es más elevado que nunca.

Esto, dijeron, es debido al aumento del comercio y el turismo, lo que significa una amenaza constante para la salud de las plantas y, consecuentemente, para los humanos, el medioambiente y la economía.

Entre las medidas más importantes están las normas y protocolos de diagnóstico para detener plagas muy invasivas como la Xylella fastidiosa y la mosca oriental de la fruta.

De igual manera, los integrantes de la CIPF avalaron 10 normas de protocolos de diagnóstico, pues aseguraron que garantizar un análisis correcto es esencial para intervenciones oportunas y lograr un control de plagas rápido y efectivo.

Además, votaron una nueva norma que ofrece orientación sobre métodos mejorados de fumigación, que responde a la creciente preocupación sobre los plaguicidas que pueden ser perjudiciales para la salud humana y el medioambiente.

Asimismo, emitieron recomendaciones sobre tecnologías de secuenciación de alto rendimiento (HTS, por su sigla en inglés) que se encuentran en las primeras fases de desarrollo y permiten detectar plagas.

Francisco Javier Trujillo Arriaga, director en jefe del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) de México, consideró que estas medidas ayudarán a generar conciencia en los gobiernos y la sociedad sobre la importancia de la sanidad vegetal.

En la reunión se discutieron alternativas para reducir los riesgos de las plagas vegetales en contenedores marítimos que, aunque no transporten mercancía agrícola, pueden ser la vía de transporte de especies invasoras.

La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) estima que entre 20 % y 40 % de la producción agrícola mundial se pierde cada año a causa de las plagas.

Del mismo modo, calcula que las enfermedades de las plantas cuestan a la economía mundial alrededor de 220.000 millones de dólares anuales, y los insectos invasores unos 70.000 millones de dólares.

La CMF anunció que para 2020 buscará promover mayor colaboración, participación y sensibilización a nivel mundial, para respaldar las políticas fitosanitarias a todos los niveles.

Esto ayudaría de forma significativa a cumplir la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible que impulsa la ONU, en consenso con todos los jefes de Estado que la integran.

La reunión se llevó a cabo en la sede de la FAO con más de 400 participantes.

En el evento estuvieron representantes de las organizaciones nacionales de protección fitosanitaria (ONPF) de 183 países y organismos regionales e internacionales en la materia.

EFE